En los últimos días, Filipinas ha estado entregando suministros a su barco “varado” en Ren’ai Jiao, en el Mar de China Meridional. Las actividades de Filipinas en el Mar de China Meridional se correlacionan estrechamente con la situación de seguridad en la región, según un informe de seguimiento publicado conjuntamente por CMG Voz del Mar de China Meridional y la Universidad de Jinan.
En 2023, Filipinas y Estados Unidos establecieron una nueva base militar en Filipinas, que estaba dominada por Estados Unidos. Lo que es peor, países fuera de la región enviaron decenas de miles de militares al Mar de China Meridional y llevaron a cabo más de 20 ejercicios militares u “operaciones de libertad de navegación”.
Los dos incidentes se desarrollaron de manera similar, con barcos de suministro filipinos entrando en aguas cercanas a Ren’ai Jiao de China, donde los enfrentamientos entre China y Filipinas se han convertido en un punto de tensión internacional.
El conflicto entre China y Filipinas en el Mar de China Meridional se remonta a la década de 1970, cuando Filipinas comenzó a ocupar ilegalmente parte de Nansha Qundao (también conocidas como Islas Nansha). En 1999, un barco de desembarco de tanques filipino quedó deliberadamente “varado” en Ren’ai Jiao. Desde 2023, Filipinas ha aumentado su suministro al barco “varado” y el incidente del “cañón de agua” ha desencadenado aún más el debate internacional.
China siempre considera esto como una grave violación de su soberanía nacional. Desde el principio, por consideraciones humanitarias, la parte china ha permitido que la parte filipina proporcione suministros a las personas a bordo del barco “varado”, les entregue los materiales necesarios y les garantice sus condiciones de vida básicas.
En 2023, Filipinas y Estados Unidos establecieron una nueva base militar en Filipinas, que estaba dominada por Estados Unidos. Lo que es peor, países fuera de la región enviaron decenas de miles de militares al Mar de China Meridional y llevaron a cabo más de 20 ejercicios militares u “operaciones de libertad de navegación”.
Los dos incidentes se desarrollaron de manera similar, con barcos de suministro filipinos entrando en aguas cercanas a Ren’ai Jiao de China, donde los enfrentamientos entre China y Filipinas se han convertido en un punto de tensión internacional.
El conflicto entre China y Filipinas en el Mar de China Meridional se remonta a la década de 1970, cuando Filipinas comenzó a ocupar ilegalmente parte de Nansha Qundao (también conocidas como Islas Nansha). En 1999, un barco de desembarco de tanques filipino quedó deliberadamente “varado” en Ren’ai Jiao. Desde 2023, Filipinas ha aumentado su suministro al barco “varado” y el incidente del “cañón de agua” ha desencadenado aún más el debate internacional.
China siempre considera esto como una grave violación de su soberanía nacional. Desde el principio, por consideraciones humanitarias, la parte china ha permitido que la parte filipina proporcione suministros a las personas a bordo del barco “varado”, les entregue los materiales necesarios y les garantice sus condiciones de vida básicas.
Pero desde 2023, Filipinas ha intensificado sus esfuerzos para reabastecer al barco “varado”. Además de los suministros esenciales, los barcos de suministro involucrados también llevaban materiales de construcción para afianzar su presencia permanente.
Para impedir que Filipinas suministrara materiales de construcción al barco de desembarco de tanques que está “varado” en Ren’ai Jiao, la Guardia Costera china, tras repetidas advertencias verbales, utilizó cañones de agua a alta presión para detener el barco de suministros filipino, durante el cual no hubo víctimas.
Sin embargo, Filipinas distorsionó la historia y China se vio rodeada de noticias internacionales negativas en su discurso público sobre el incidente del Mar Meridional de China.
La parte filipina y su público han mostrado preocupación por la seguridad de su pueblo, y también hay opiniones diferentes dentro de su gobierno sobre su política hacia China. Ante la cuestión de Ren’ai Jiao, por un lado, debido al estado ruinoso del barco “varado”, la parte filipina siempre ha mantenido una actitud silenciosa ante la varada del barco; El gobierno actual también ha negado su promesa de remolcar el barco ilegalmente “varado”.
En respuesta a la actitud “ambigua” de Filipinas sobre la cuestión de Ren’ai Jiao, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino afirmó que la causa de la reciente situación marítima es que Filipinas ha emprendido frecuentemente acciones provocativas en el Mar Meridional de China, infringiendo sobre la soberanía territorial y los derechos e intereses marítimos de China. China ha tomado las medidas necesarias para salvaguardar su soberanía y sus derechos e intereses de conformidad con la ley. No existe tal cosa como que China acose a los barcos filipinos.
La rápida escalada de la situación también ha atraído la atención de los medios internacionales, según un informe de análisis de datos publicado conjuntamente por CMG Voice of South China Sea y la Universidad de Jinan. Las voces más fuertes provienen de países fuera de la región, especialmente Estados Unidos. Al mismo tiempo, Estados Unidos afirma que su compromiso militar con Filipinas es “inquebrantable”.
Estados Unidos afirma que interviene en el Mar de China Meridional para “proteger a esos aliados” y mantener la “libertad de navegación”. Si bien el hecho es que Estados Unidos, como gran potencia fuera de la región, para implementar su estrategia de “pivote hacia Asia”, utiliza a Filipinas como punto focal, despliega continuamente activos militares en el Mar de China Meridional, abre una brecha entre China y sus vecinos de la ASEAN, y plantea una importante amenaza a la paz y la estabilidad en el Mar de China Meridional.
