Repecto al fuerte sismo de este fin de semana y sus réplicas, «es cierto que es una liberación de energía, pero no es importante esta liberación de energía», agregando que «es bastante marginal comparada con la energía que está cumulada en el interior de la tierra. Estamos esperando un terremoto de magnitud del orden de 9, esto es una zona de 500 kilómetros por 200 kilómetros de ancho, que se debiera mover más de 10 metros (entre las placas)».
Y agregó que para la zona nortina aguardan «un terremoto grande, parecido a lo del 27 de febrero en el Maule. Eso es lo que se ha estado hablando desde el siglo pasado para el norte de Chile (…) Lo que sí podemos decir es que va a ocurrir un gran movimiento entre las placas en el norte de Chile, donde no ha ocurrido nada desde hace más de 130 años, en 1877 fue el último movimiento importante entre estas placas».
Por último, Pardo dijo que «desde hace tiempo que estamos diciendo que el norte de Chile es más peligroso. Podemos hablar de Copiapó también que es una zona peligrosa, donde desde 1922 que no ocurre un terremoto importante (…) En la zona entre La Serena y Los Vilos, donde el último evento importante fue en 1943. Y podemos seguir a lo largo de todo Chile».
