«Personalmente, no tengo muchos buenos momentos en Roland Garros», responde el ex tenista John McEnroe en una entrevista telefónica con varios medios internacionales. La pregunta es sobre los tres mejores instantes que recuerde del Grand Slam parisino, pero después de citar vagamente a Rafael Nadal y Novak Djokovic no puede evitar rememorar su propia experiencia.
En París, el volcánico estadounidense nacido en la localidad alemana de Wiesbaden sufrió durante la final de 1984 la derrota más dura de su carrera. Después de ganar los primeros dos sets a Ivan Lendl por 6-3 y 6-2, encajó una dolorosa remontada que le impidió levantar el título cuando más cerca lo tenía. La rivalidad con el checo fue de las verdaderas, esas que se sazonan con rencor. «Tengo más talento en el meñique que Lendl en todo el cuerpo», decía uno. «Odia a todo el que puede ganarle», respondía el otro.